Miles de Significados - ¿Todo sucede por algo?

Za´el: Hola. Te doy la bienvenida como siempre. Es un placer tenerte de vuelta. Aquí Za'el.

Estoy completamente seguro de que alguna vez has escuchado eso de que todo sucede por algo o todo sucede por una razón. No suelo estar muy a favor de los refranes o dichos, porque no me gusta pensar en absolutos ni me gusta generalizar, porque incluso cuando una norma general aplique el 99% de las veces, siempre hay circunstancias, siempre hay excepciones, siempre hay un "pero" o muchos. Tambien es muy posible que puedas pensar que esta frase cae dentro de lo que llamaríamos positividad vacía o frases hechas, de las que no puedes sacar un valor práctico y realista.

Mi observación, desde el punto de vista más expandido posible, es que por lo general, sí, todo pasa por algo, todo tiene una razón de ser. Puede ser por expandir tu conciencia, por vivir nuevas experiencias, por aprender, por hacerte fuerte, aunque, como opinión impopular, me atrevería a decir que no necesariamente debe ser por algo como eso... y es que tiendo a pensar que la Fuente, siendo el motor o el núcleo que anima todo y que trabaja a través de ti, estés en la densidad que estés, no siempre tiene por qué seguir una cadena lógica de pensamientos y una intención coherente a lo que tú, hoy, aquí, interpretas como lógico o coherente. No como pensando... "Me aburro, quiero experimentar algo nuevo."

Siento que eso pertenece a un nivel no tan arriba, en el que aún tienes conciencia de ti mismo, ya sea en la entrevida o en densidades muy altas, donde por poco que exista el concepto de un Tú, o incluso percibiéndote a ti mismo como un colectivo, por ejemplo, el caso es que aún sigue en cierta medida, estando ahí. Entonces, sí que tiendo a pensar que, siendo que la Fuente es eso que realmente eres, eso que te anima, que te da vida y conciencia de ti mismo, que no tiene principio ni fin, a veces puede no seguir patrones lógicos o con algo cuidadosa y estratégicamente calculado.

Y este es un concepto muy difícil de expresar para mí, porque ¿cómo podría ser que la Fuente, estando técnicamente por encima de esas densidades y de lo que llamamos entrevida, no siga un plan estratégicamente establecido con plena intención y lógica, cuando en esas densidades sí que la hay? Porque esas densidades o estados de conciencia, con sus leyes y normas, su lógica y su coherencia, las percibimos como tales a partir de esa idea que en primera instancia nació. Aunque aquí ya no estoy expresando como realmente lo creo, porque ya entra una visión lineal que no aplicaría.

Pero volviendo a algo no tan complejo y siendo conscientes de que creamos la realidad que vivimos en base a quienes somos, a lo que nos forma, con la percepción lógica que sí tenemos ahora mismo, te diría que todo podría suceder por algo, si. Y, además, no por una, sino por miles de potenciales razones.

Ahora, dejando a un lado lo que desde más arriba podamos haber decidido experimentar en esta vida que ahora percibimos, porque desde ese punto de vista sí que existe ese tipo de razones, en este caso me refiero a algo mucho más práctico y palpable que podría cambiar tu experiencia por completo desde tu punto de vista lineal actual. Desde mi propio punto de vista o mi propia experiencia, y hablando primero de algo totalmente visible y reconocible a primera vista, cualquiera de las horribles experiencias que puedas haber tenido han dado lugar a una sucesión de eventos en tu vida que te han llevado por distintos caminos que quizá no habrías experimentado de no ser por dichas experiencias. Y esos caminos no tienen por qué ser todo de rosa y todo de flores a partir de entonces. Lo más probable es que hayan estado repletos de otras vivencias tanto buenas como malas que han dado forma a tu historia.

Todas esas vivencias, como hemos hablado, enriquecen al alma, si quieres llamarla así, que podría incluso imaginar otras líneas de tiempo u otras realidades en las cuales el camino ha sido distinto y, por tanto, crear dichas realidades que también la enriquecen.

Pero me gustaría recordarte que, desde otro punto de vista, tú estás creando tu camino en tiempo real. Todo el tiempo, tu destino está siendo determinado por quién eres ahora y tu percepción de las cosas y especialmente tu presente, por supuesto. Todo está ya en el éter, todo existe, y todas las posibilidades ya están ah. Por lo tanto, las cosas o los sucesos no tienen solamente un significado o un propósito desde este punto de vista, sino que pueden llegar a tener tantos potenciales propósitos, objetivos o significados como tu mente, tú, seas capaz de imaginar.

Con esto, no estoy diciendo que des siempre por hecho o que tomes la conclusión certera de que un suceso está pasando por algo concreto porque tu así lo decides y ya. Eso para mí es esconder un poco la cabeza en la arena o no querer ser realmente consciente de tu realidad, aunque todo es debatible. Lo que quiero decir es que, por ejemplo, cuando un buen evento para ti está ocurriendo, podría ser señal de muchas cosas buenas, aunque también podría estar abriendo camino a otras malas y todo eso es posible. Debes enfocarte en lo que quieres y en cómo lo que está ocurriendo ahora o lo que ya ha ocurrido puede estar alineando las cosas para llegar a ese destino.

Aunque el mero hecho de que te sucedan cosas increíblemente buenas es un indicativo de que tu frecuencia podría estar yendo por buen camino, sigue así, pero también sucede con las cosas malas. Es bastante habitual tender a caer en pensar que si las cosas están yendo mal ahora y las puertas están cerrando significa que se están perdiendo las posibilidades de vivir eso que a ti te gustaría. Y, aunque puede que seamos una coincidencia de frecuencia con esa situación en ese momento, si tú sigues enfocándote en lo que realmente quieres y cuidas tus pensamientos, tu estado de ánimo, tu vibración, tenderá tu frecuencia a mantener un estado base o dominante en ti cada vez más alto a pesar de lo que eventualmente pueda suceder, como es normal en la vida.

La importancia de las palabras, verbalizadas o no, y, como dije anteriormente, es inmensa. En este caso, el significado que le das a esos pensamientos que surgen al enfrentar una adversidad o problema presente, están determinando el camino que seguirás en tu línea de tiempo. Porque tu forma de percibir las cosas al final determina quién eres, y lo que eres, manifiestas, especialmente si es el miedo la emoción predominante en esas ideas.

Entonces, cada vez que tres puertas se cierran de golpe ante ti, primero has de pensar que ningún camino que merezca realmente la pena en ese planeta es sencillo o... vaya, aquí he sido yo el que ha generalizado. Bueno, digamos que es una norma general.

Pero lo que es seguro, es que esos eventos abren prácticamente infinidad de posibilidades que existen ahí en algún sitio y que podrían estar indicandote que es mejor esa otra puerta que ves a lo lejos. Sí, esa puerta vieja y mugrienta, llena de espinas e incomodidades. Puede ser que pasar por esa puerta te haga sufrir, te haga llorar, te haga pasarlo muy mal, pero... ¿realmente deseas llegar a ese objetivo que tienes en mente?

Entonces, plantéate si quizá merezca la pena tomar esa otra puerta. Quizá descubras que por el camino que querías ir al principio las cosas no habrían tenido tanto sentido o no habrían sido ideales. O quizá descubras que aquello era incluso totalmente necesario para llegar y no te estabas dando cuenta.

Cuando uno ve una obra medio hacer, se encuentra con un montón de escombros, tierra que cae, suciedad, ladrillos rotos e incluso se siente peligro al estar en ella, pues podría caerte encima alguna viga no asegurada o alguno de esos escombros. Todo está feo y sin decorar ni pintar y te ensucias con solo entrar ahí y moverte por ella. No hay puertas ni ventanas y todo parece inseguro e incluso dejado a medias o abandonado, como si no llevara a ningún sitio. Pero ver las cosas simplemente de esa manera no solo es triste, sino que no tiene sentido, puesto que eventualmente sucederán varias cosas de forma asegurada.

Puede ser que esa obra no llegue a nada, sí, pero un día dejará de tener atención y acabará por disolverse, quedando como una experiencia más que no forma parte de tu presente activamente, produciéndote todas aquellas sensaciones, sino simplemente como algo que te ha formado. Puede pasar que esa obra que no iba a ningún sitio se derrumbe para dar paso a otra nueva, pero en ese caso volverás a encontrarte entre escombros, peligros y sensaciones incómodas.

Y también puede pasar, y esto para mí es lo más importante, que lo que ahora son ladrillos rotos y vigas mal aseguradas se acabe convirtiendo justamente en la casa que buscabas tener.

No juzgues las posibilidades de tener o no eso que deseas basándote en la incomodidad de la obra que hoy estás observando. Es que una casa no nace de la nada. Necesita construirse y para ello necesita pasar por esa fase de incertidumbre e inseguridad muchas veces. La obra puede incluso venirse abajo cuando estaba a punto de completarse. Eso solo significa que habrá que seguir un poco más.

Sé que te gustará escuchar esto, aunque me gustaría que nunca más dependieras de alguien externo que te diga lo que estoy a punto de decirte para que confíes en ti. Si la necesitabas, esta es tu señal.

Sí, todo podría estar pasando por algo, tiene sentido, pero depende solamente de ti encontrar ese sentido. ¿Cómo podría esta situación estar moviendo las cosas para que ocurra lo que deseas? ¿Podría ser más conveniente ahora o al final de este proceso de lo que lo era antes?

No es positividad vacía. El posible significado que tú encuentres en lo que estás viviendo ahora definirá y dará forma poco a poco a esa realidad que buscas. Con suficiente persistencia, atención y fuerza, esa realidad se estará formando. Recuerda que en densidades más bajas se requiere de mayor constancia y tiempo de atención para hacer existir ciertas cosas, sobre todo cuando se salen de lo que las normas de ese reino dictan en teoría.

No te dejes consumir por tus pensamientos, encuentra el significado, muévete hacia lo que deseas proactivamente y no te rindas.

Za'el de Erra