¿Luchar o no Luchar? - El Peligro de dejar de creer en ti mismo
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Autora/Autor
Za'el y Arien - EspañolPublicada/Publicado
December 23, 2023¿Luchar o no Luchar? - El Peligro de dejar de creer en ti mismo
Za´el: Hola y te doy la bienvenida. Muchas gracias por entrar a escuchar. Aquí Za'el.
Soy consciente, y seguramente mucho más de lo que imaginas, de la inmensa dificultad para mantener alta la esperanza y la determinación en las circunstancias terrestres en muchas ocasiones. Por eso, muchas veces se genera un comprensible rechazo a los mensajes motivadores o empoderadores que animan a ver las cosas desde un filtro o punto de vista más positivo, puesto que la persona en cuestión cree que ya pensó en positivo durante mucho tiempo, ya luchó durante mucho tiempo, ya empleó todas sus fuerzas y toda su energía en intentar manifestar aquello que deseaba, sin resultados favorables.
Llegado a un punto en la evolución de una semilla encarnada en la Tierra, ya no se trata de la dificultad del pastoso 3D, con un gran tiempo de paciente espera y constante atención en aquello a manifestar, puesto que, llegando a cierto grado de conciencia, inevitablemente se empieza a manifestar las cosas mucho más de prisa, casi al instante. Sí, incluso ahí, el 3D no es una limitación para eso.
El problema, o lo peor de esto, es que esas cosas que se logran manifestar casi al instante, o con horas de diferencia, a menudo son cosas sin importancia para la persona. Pero lo realmente importante, eso que significaría un cambio sustancial positivo para ti y para tu vida, lo que te aportaría esa experiencia que estás deseando vivir, no cesa en fracasar o incluso en alejarse, a pesar de los muchos esfuerzos por traerlo a tu vida.
Aquí hay que tener en cuenta muchos factores diferentes. Para empezar, por supuesto, debemos recordar la conexión natural existente entre todas las personas que conviven dentro de un conjunto de acuerdos, cuya media forma eso que llamamos vida, o realidad. Las normas por las que se rige tu mundo.
Una semilla en un alto nivel de conciencia afecta a esa realidad en un porcentaje muchísimo mayor. Cuenta con un poder de influencia en dicho mundo muchísimo más significativo y depende de cada caso. Por ende, y razonando a partir de aquí, si una de estas semillas se dejase llevar por el derrotismo y la oscuridad a la que se tiende al pasar por una mala etapa, dicha semilla estará aportando eso mismo a la realidad a la que afecta, manifestando para sí misma un mundo aún más cruel que ese que la hizo entrar en ese estado precisamente. Con esto, también mermando poco a poco su frecuencia base y con ello su poder de influencia positiva. Y, aunque de todo se puede salir y no es algo sin arreglo, debes pensar en lo que hay en juego a la hora de ceder a esos pensamientos negativos.
Por eso se ha mencionado y enfatizado anteriormente en repetidas ocasiones por mis compañeros la gran responsabilidad que sobre una semilla consciente recae, como en la famosa y correcta frase de la película "SpiderMan": "Un gran poder conlleva una gran responsabilidad". Es algo a tener seriamente en cuenta.
Por otra parte, en lo referente al rechazo a lo que antes podía motivarte, hay un peligro mucho más grande. Lo importante no es si te calan o no los mensajes positivos que puedan llegarte de forma externa. Lo verdaderamente importante, y donde reside el verdadero peligro, es perder o no la fortaleza propia, la capacidad para ver las cosas de manera objetiva y nunca derrotista o determinista porque, realmente, solo hay un momento en el que objetivamente has perdido sin remedio y es el momento en el que te rindes contigo mismo. El momento en que empiezas a dudar de tus propias capacidades, que a menudo viene seguido por dudar de todo lo que creías positivo en tu realidad o de todo lo que creías tener claro.
Es comprensible esa necesidad de derrumbarse en esta circunstancias, no voy a decirte que no sea lo natural, ni mucho menos te diré que eres débil por sentir eso o pensar de esa manera dadas las circunstancias. Quiero que sepas que lo entiendo, que eso es a veces lo que precisamente más necesario es, sentir que alguien te entiende.
Pero sin dejar de permitirte tu propio espacio para estar mal o para plantearte aquello que necesites plantearte, también me veo en la posición o el deber de informarte del peligro de dejarse llevar demasiado por esa oscuridad, porque a veces la tendencia a recrearse en el sufrimiento acaba siendo, precisamente, lo que termina por hacernos compatibles con aquello que rechazamos y que tanto nos duele.
Me veo obligado a recordarte la poderosa importancia de las palabras, sobre todo las que utilizamos contra nosotros mismos que dan forma a nuestro inconsciente y por tanto la forma en que percibimos la realidad. Por lo tanto, en definitiva, a la realidad en sí misma. Tú decides o tú eres quien debe valorar de manera responsable donde está la línea que delimita la razonable retirada de tus defensas mentales y energéticas y dónde empieza el autosabotaje que afecta de forma directa a tu frecuencia y a las cosas que acabarán apareciendo en tu vida.
También hay un factor más a tener en cuenta y de suma importancia y aquí quizás estoy entrando en algo mucho más personal y es que, cuando tu lucha implica los sentimientos y la voluntad de otras personas, es algo mucho más complicado. Creo que es algo honorable y precioso luchar por hacer felices a aquellas personas que para nosotros merecen tanto la pena ó son tan importantes y valiosas en nuestra vida, creo que es algo que debe intentarse y nunca tirar la toalla a la ligera si de verdad deseas eso.
Sin embargo, si llegado el momento percibes o piensas que su voluntad, sus deseos, sus sentimientos, son opuestos a los tuyos, me temo que solamente te queda una alternativa, porque seguir luchando en esos casos no solamente resulta invasivo para la otra persona o personas, cosa que creo que debemos evitar a toda costa. También resultaría en hacerte daño a ti mismo y eso sostenido en el tiempo, supongo que tienes la información necesaria para intuir o concluir en qué termina resultando, sobre todo después de lo anteriormente explicado.
Y es que en este caso, así como en otros en los que manifestamos cosas irrelevantes para nosotros o incluso negativas y no las que realmente deseamos, en realidad a veces estamos mucho más enfocados en el hecho de que las cosas no son como queremos... entonces, más de eso tenemos en nuestra vida.
Por esto mismo, valorando, por supuesto, cada caso bajo responsabilidad propia, quizá la mejor opción que tenga sea dejar de resistir aquello que se presenta ahora en tu vida. Pero, siendo que siempre hemos estado hablando sobre no rendirse, sobre no resignarse y sobre no dar nada por perdido, cómo encaja eso con todo esto? ¿Me contradigo, acaso?
Bueno, somos personas y estamos llenos de contradicciones muchas veces. Sin embargo, muchas de esas veces, entre las cuales incluyo esta, lo que en principio parece contradictorio depende simplemente de la situación o pasa a ser complementario en un cuadro mucho más grande que una simple norma general a seguir.
A veces la batalla más dura es precisamente la de luchar contra ti mismo y dejar de resistir aquello que temes. Acéptalo, respeta que las cosas sean como son ahora. No significa que sean así mañana. Quizá, tras haberlo intentado todo, aún te quede una poderosa arma, integrarlo todo. Puede que las cosas no cambien, en cuyo caso habrás aprendido a ser feliz a pesar de ello y con el orgullo de haber hecho porque fueran distintas. Lo que importa no es el resultado fuera, sino el resultado en ti.
Pero además, es posible que precisamente dejar de resistir lo que rechazas acabe generando que atraigas eso que querías atraer. ¿Quién sabe qué sorpresas te tienes reservadas a ti mismo?
Además, el hecho de librar esa última batalla, frente al miedo de perder aquello que tanto anhelas por el hecho de dejar de luchar, es en si un acto de amor hacia ello, como no existe ningún otro. Si eres capaz de hacerlo, siéntete orgulloso.
Sé que llega uno de esos constantes golpes que se lleva consigo la voluntad por continuar creciendo, esforzándose, experimentando, conociéndose a uno mismo, o luchando por tus sueños y metas. Pero en esos golpes devastadores es donde se decide realmente quiénes somos y de que somos capaces. Es donde se decide nuestro destino, porque es donde se decide también cuán estable es nuestra frecuencia.
Donde se comprueba la verdadera fortaleza de uno mismo, no es ni siquiera en las múltiples veces que se levanta o se recupera de los golpes. Donde realmente se comprueba, es en ese golpe que parece el definitivo y del que ya no quieres levantarte. Fuera cual fuera la razón que te hizo compatible con vivir eso en un primer lugar, ahora ya estás ahí, hemos llegado hasta aquí... ¿y ahora? ¿Qué piensas hacer?
¿Vas a superar esa experiencia que algunos llaman "escuela para almas"? ¿Vas a hacerte responsable de tus pensamientos y tu frecuencia? ¿Vas a rescatarte a ti mismo, o vas a dejarte caer en esa baja frecuencia?
Tu destino depende de ti. Yo creo en ti! Dejar de luchar no siempre significa rendirte, a veces significa... precisamente... que jamás te rendirías. Asume tu responsabilidad.
Muchos abrazos,
Za'el de Erra
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